Nos paso una vez con Gustavo Marcaccio, que el estaba con tenis pro y le quería hacer una nota a Roger. El no se animaba a pedírsela porque decía que no se la iba a dar, que no le iba a dar bola y yo gusto ese año había clasificado para jugar al cuadro principal y tenia la credencial de jugadores y podía estar en el sector donde se encuentran todos. Entonces me dice: “mira anda a vos que tenes la credencial y pedile haber si te da unas palabras”. Al final fui con una cámara y le dije “Roger Roger”, el justo salía de entrenar, lo seguimos como 300 metros porque hay dos modos de salir: Una es por un pasillo en el cual te esta esperando todo el mundo y la otra es por una escalerita en el cual te metes en el medio de la gente, él eligió esa. Se puso un buzo común y corriente y salió como camuflado, se fue caminando por entre medio de miles y miles de personas y nadie se dio cuenta porque todos lo estaban esperando en otro lado. Nosotros lo seguimos por ahí, no podíamos creer que pase entre medio de tanta multitud, cuando terminamos de pasar por ahí le volvimos a gritar y se dio vuelta y nos pregunto que queríamos; le dije: “mira te queremos hacer una nota, para el programa de el (Marcaccio), y ahí, Gustavo, no tuvo la mejor idea de querer sobornarlo diciéndole que si nos daba la nota le regalamos este par de antejos (unos que les daba la publicidad del programa). Obviamente a Roger no es que le vas a comprar una nota por un par de anteojos asique nos dijo: “no, no chicos, discúlpenme pero no, no la quiero hacer”, agarro y se fue.
Más tarde Roger le terminó dando la entrevista para el programa:
Saludos, la seguímos.
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